Por: Daniel Eduardo Tenorio Arce
Todos los días, en todo el mundo, la gente pide y presta dinero. Ya sea para salir de algún apuro, o bien, lo necesitan para echar a andar algún proyecto que requiere la inyección de capital. Y esto no tiene nada fuera de lo común, lo malo es que quien presta, no se toma la molestia de verificar la manera en que le van a garantizar el pago de esa deuda.
En otras palabras, el que prestó no se dio a la tarea de investigar si la persona que le debe dinero, tiene bienes suficientes para garantizar el pago. Ya prestó y ni siquiera sabe si el otro tiene para pagar o con qué responderle si no le paga.
Desafortunadamente, en muchas ocasiones los créditos de los que hablamos no se pueden recuperar, porque el deudor no tiene bienes suficientes para responder por la deuda, lo que provoca que quien prestó el dinero, sufra ese daño en su bolsillo, lo que a nadie le gusta.
Por esa razón, le recomendamos que antes de prestar dinero, se tome el tiempo necesario para documentar la deuda y de ser posible, garantizarla con algún inmueble.