Como dijera un experto en productividad personal: No todos los japoneses son iguales (aunque aparentemente se parezcan mucho entre ellos). Tampoco todos los abogados son iguales y esto es importante para usted, ya que cuando se enfrente a un problema legal que requiera que contrate a un abogado, elegir mal le va a dar dolores de cabeza, le va a hacer gastar mucho dinero y, lo peor de todo, no va a resolver su preocupación.
Estará de acuerdo entonces en que elegir un buen abogado, aunque todos parezcan iguales, es un paso importante y que debe darse con mucho cuidado para no tropezar. Los siguientes comentarios le pueden ayudar a distinguir que clase de abogado es el que piensa contratar:
- Hablando en términos generales, encontrará que solo hay tres tipos de abogados: a).- Los abogados malos y baratos que obviamente dan resultados malos y caros (lo barato sale caro dicen por ahí); b).- Los abogados que hacen un trabajo legal de “regular” categoría y que cobran lo que cobra la mayoría de los abogados y tienen un promedio regular de casos ganados y; c).- Los abogados de “élite”, que dan resultados espectaculares a sus clientes, que naturalmente cobran honorarios abultados y tienen un altísimo porcentaje de casos ganados.
- La mayoría de los clientes van a querer contratar al abogado “regular”, porque no entienden la diferencia entre este y un abogado de élite y eso es normal, dado que los clientes raramente son expertos en temas legales y no saben qué tan bueno es el trabajo que está haciendo su abogado, ni conocen la gravedad de su caso.
- Algunos asuntos legales pueden ser bien manejados por los abogados “regulares” ya que no son muy complicados y no requieren conocimientos más allá de los normales, pero ¿Cómo lo sabe usted si no es experto en derecho?
- Si su caso es como el mencionado arriba, no tiene sentido que contrate a un abogado de élite, a menos que quiera prácticamente garantizar el resultado, pero si lo hace, debe estar consciente de que no podrá contratar al abogado de élite pagándole los mismos honorarios que al abogado “regular”.
- Algunos clientes (los que siempre buscan baratas), van a querer contratar al abogado de élite, pretendiendo pagarle los honorarios del abogado malo y barato o, cuando mucho, queriéndole pagar como al abogado regular.
- Le anticipo que si usted es un buscador de baratas, jamás va a poder contratar a un abogado de élite, si no está dispuesto a pagarle los honorarios que cobra y que, por cierto, por algo los cobra, pero sobre todo, por algo hay clientes que se los pagan con gusto y sin regatear.
- Algo que distingue a un abogado de élite de los otros tipos de abogados, es que este nunca va a cobrarle honorarios sin explicarle y demostrarle el valor que usted va a recibir a cambio. Este tipo de abogados le dirá claramente cuáles son los beneficios que usted va a obtener contratándolo a él en lugar de a un abogado “regular”.
- Con la explicación anterior, usted tendrá más información que le será de utilidad para tomar una decisión. Tome en cuenta lo siguiente: Si se tratara de contratar a un médico especializado en cirugías del cerebro para que lo atienda a usted o a uno de sus hijos, ¿Se pondría a regatear sus honorarios?, pues lo mismo pasa con los problemas legales, solo que usted no tiene idea de la gravedad de su asunto, porque no pide que se la expliquen claramente.
- El abogado de élite le explicará claramente las consecuencias de ganar o perder su asunto; los demás abogados le dirán que, o todo es muy fácil o que todo es muy complicado, pero en ambos casos le asegurarán que van a ganar su asunto con tal de que los contrate.
No todos los abogados son iguales así que, tenga cuidado al elegir uno. Recuerde el dicho: “Entre abogados te veas”, no vaya a verse malito con su decisión.
Por: David Cristóbal Álvarez Bernal, Socio Director de Bufete Álvarez y Asociados, S.C.